Tu casa en marrones
A veces cuando decoramos pensamos en muchos colores vivos como los turquesas, amarillos, azules, rojos y naranjas, pero en pocas ocasiones seleccionamos el color café o marrón como el principal en la decoración de nuestros hogares. Sin embargo, el color marrón es uno de los más versátiles en la paleta y por eso hoy te enseñaremos alternativas para jugar con ellos en los espacios.
Primero que todo, hay muchas tonalidades y variaciones de este color. Unos son más fríos y otros más cálidos, algunos amarillentos, otros verduzcos y otros más pasteles. Los tonos con los que desees combinar, dependerán del matiz del marrón.
Si quieres colocarlo directamente en una pared, debes asegurarte que el espacio no sea reducido y que este color no quite profundidad. De esta manera, podrás jugar más con los colores que acompañen la decoración. Además, recomendamos estos tonos para recámaras, salas y lugares de descanso, ya que su en la cocina o el baño no es el mejor.
La forma más habitual de combinar este color es con tonos ocres, naranjas y verdes, ya que al ser un tono asociado con el elemento tierra se complementan muy bien. Es una muy buena opción si queremos tener un espacio colorido, cálido y sin que la pared de fondo sea brillante o brusca.
Otro color que resalta la naturalidad y es menos usual verlo combinado con marrón, es el amarillo. Puedes probar esta combinación apoyándote en los sillones, cojines, cuadros o algún mueble que sean claves en este espacio.
Para un espacio un poco más sobrio y serio, podemos jugar con colores más neutros, como crema, blanco, negro y otros matices de marrón. Si no quieres que luzca con un aspecto un poco vacío y sin vida, puedes jugar con elementos de decoración diferentes, como plantas con colores verdes y blancos, estampados, degradados e iluminación. En estos casos, debes de tener muy en cuenta este último elemento, ya que si cuentas con un ventanal o un tragaluz, sería un detalle que complementaría el espacio a la perfección.
Puedes acompañar tu decoración con un espejo con detalles en dorado o bronce.
Para los más arriesgados, aún contrario a lo que podríamos pensar, el café puede ser la base de una decoración preciosa, combinándolo con colores fuertes y pasteles. Si te gusta la decoración bohemia, este estilo te quedará de lujo, solo debes tener mucho cuidado de no exagerar y no incluir más de 3 o 4 tonos diferentes para que no se vea muy cargado.
Tu hogar en verde
El verde, el color favorito de muchos. Inspira naturalidad, reflexión y equilibrio. Podemos encontrar una gama extensa de tonos verdes y cada uno puede dar un acabado totalmente diferente.
Cuando es un verde claro, como color lima, es especial para cocinas o dormitorios juveniles, ya que es el verde más enérgico y tiende a ser asociado con aquellas frutas cítricas. Lo puedes combinar con tonos naranjas y fucsias para contrastar. Si quieres que transmita calma, puedes combinarlo con beige, colores marrones claros e inclusive grises.
Si se trata de un verde más potente como un esmeralda, es importante que lo utilices en bajas cantidades y combinado con colores neutros.
Cuando quieras utilizar un verde más claro o pastel, lo ideal es que lo combines con otros colores pastel, utilizando de base el beige. De esta manera te quedará un look muy “vintage” y fresco.
Para exteriores los colores verdes que se recomiendan son un poco más “olivo”, ya que estos combinan perfectamente con los colores tierra y transmite mucha naturalidad.
La importancia de los textiles
Los textiles son el instrumento perfecto para renovar, dar color o cambiar el aspecto de un espacio de tu hogar, ya sea la sala, el comedor o el dormitorio. Por esto, una vez que hemos elegido los muebles y el color de las paredes, debemos prestar atención a los textiles.
Lo más usual es apostar por muebles sencillos y sofás en tonos sobrios para dar color y alegría a través de los accesorios, cojines y cortinas que siempre podremos cambiar con más facilidad; pero hay muchas formas de hacerlo aún más atrevido y agregando otros elementos.
En ocasiones se tiende a asociar las alfombras con los espacios fríos, dejando de lado las enormes posibilidades decorativas que nos ofrecen. En la zona del sofá se puede completar el conjunto, de manera que si tenemos paredes de colores pálidos, podemos jugar con toda la gama de colores que combine con los sillones y los demás elementos decorativos.
Si tenemos algún sofá o sillón que tenga mucha presencia en un espacio, es perfecto para aprovecharlo y darle más vida, de forma tal que el sillón por sí solo sea la pieza central y todos los demás elementos se acoplen a él
Las cortinas son parte esencial de la decoración. No solo tendremos que pensar en los colores y estampados elegidos, sino que debemos decidir el tipo que va más con el estilo de nuestro espacio. Puede ser floral, geométrico, abstracto, o que corresponda a una corriente de decoración en específico.
Si queremos un toque clásico, las caídas son la mejor opción; si queremos algo muy discreto entonces unas cortinas rectas que apenas cubran una parte de la ventana quedarán genial. Para los espacios más minimalistas, se pueden considerar persianas de telas con colores base.